Gracias por tu visita

sábado, 21 de octubre de 2017

En el 2018, una oportunidad diferente para continuar o terminar tus estudios en nuestro Liceo.








Sembrar, a pesar de la incertidumbre; ésa es la misión sagrada de la docencia.



47


Educar a las semillas de la nada
y colgarlas como cuentas transparentes
de las ramas más calladas de un árbol.
Algunas serán llevadas por los pájaros,
otras se pegarán al viento
y algunas se hundirán en las miradas
o en las palabras sueltas
que a veces se arremolinan en el aire.

Y a través de esas limpias mediaciones
caerán detrás de la sequía,
torcerán el invierno,
se alzarán sobre la torre rota
y hasta quizá germinen sin notarse
entre los mustios epitafios.

Porque nos hace falta esta cosecha.
Todas las demás se consumen,
se pudren como la sombra del agua,
como panes de polvo.

Sólo resta la cosecha de la nada,
pero antes hay que efectuar la siembra.
Las semillas están en todas partes:
es preciso enseñarles a brotar.

Hay que educar a las semillas de la nada
para que puedan germinar como las otras.

Roberto Juarroz


de Duodécima poesía Vertical
Ediciones Carlos Lohlé, Buenos Aires, 1991


De: http://poelobo.blogspot.com